martes, 15 de julio de 2008

EL OCIO Y SUS PROBLEMAS Y III


3. QUE HACER POR TANTO CON EL TIEMPO DE OCIO

Podrían recomendarse ingenio e imaginación a padres y educadores. Pero es en cierto modo una batalla perdida de antemano: ¿qué puede ofrecer un padre como alternativa a un botellón o a una discoteca?

Por triste que sea, hay muchas situaciones, con chicos y chicas con hábitos arraigados, en las que ya la única solución es casi la de no proporcionar los medios económicos que precisan aquellos para dar rienda suelta a sus deseos; y sobre todo la de procurar favorecer la cercanía a Muchachos y muchachas de vida sana, a la incorporación a grupos con actividades ilusionantes: scouts, grupos de montaña, asociaciones de ayuda a minusválidos u otras…

Favorecer en definitiva la implicación en actividades que obliguen a contar con los demás, porque así se les aleja del egoísmo, sima de la que surgen el aburrimiento y el tedio, y se les Proporcionan objetivos ilusionantes para su tiempo libre.

Yendo a lo concreto, pensando en aquellos a quienes este dossier puede ser útil, se concluye que, si se desean evitar males tremendos en los jóvenes, y que estos sigan siendo jóvenes en la vejez: con ilusiones y esperanzas, las recomendaciones más eficaces para los padres son tres: poco dinero, paciencia y ejemplo personal sacrificado.


*Poco dinero:
No hace falta muchas explicaciones: que no les llegue el dinero, y además hay que exigirles que ahorren: es importantísimo que sean capaces de no gastar todo lo que se les da, aun siendo poco.

*Paciencia:
No se trata tanto de no enfadarse como de no cansarse de explicarles, una y otra vez, una y otra vez, lo que hagan mal, sin acostumbrarse; señalar unos límites: horas de uso de internet, hora de llegada…, y ser inflexibles.

*Ejemplo personal sacrificado:
Lo más necesario, es más lo más irrenunciable. Y aquí es donde hará falta más espíritu de sacrificio por parte de sus padres y educadores. Porque es necesario que los padres estén dispuestos a no hacer, ellos, lo que no desean que hagan sus hijos. Unos cuantos ejemplos entre muchos posibles:

- Si papá y mamá salen tanto, yo en cuanto sea mayor lo haré. Y los niños deciden que son mayores muy pronto­.
- Mala cosa es que cada dos por tres los niños se queden en casa por la noche con una canguro y no vean llegar a sus padres.

- Si papá y mamá beben tanto yo en cuanto sea mayor...

- Si papá y mamá ven tanto la tele, yo también, en cuanto sea mayor, o en cuanto se vayan de casa.

- Si les ven enganchados a la red o a un juego de ordenador… ¡qué no harán ellos!.

- Si papa y mamá me dejan en casa cada vez que quieren divertirse yo ¿por qué voy a querer estar con ellos cuando me quiero divertir?

- Si papá y mamá se quejan tanto del trabajo, yo, que no tengo aun que trabajar, huiré todo lo que pueda de esa engorrosa situación.

- Si nunca veo a papá y mamá medir los gastos, yo gastaré todo lo que tenga.

- Si veo a papá a mamá meter dinero en una máquina tragaperras yo también.

Los hijos tienen que ver a sus padres leyendo, deben ir con ellos a escuchar un concierto, a visitar monumentos, a correr por el campo, a pescar o a andar en bici… deben verles por la noche jugando con ellos al parchís o a las cartas, o comentando las noticias, la situación política o económica, también rezando con ellos, deben ver que a veces no ven un partido de fútbol en la televisión, del que todo el mundo está hablando, para, en cambio, tener una tertulia de familia contando cosas, o viendo viejas fotografías de la familia.

Sólo hay un modo de que el ocio no sea un problema creciente: que aprendan a emplear el tiempo libre porque hayan visto como hacerlo; aprendido de sus padres y educadores. Si no, lo emplearán como se les ocurra, sin criterio, y ya se cuidan la industrias que viven de eso de favorecer el consumo de sus productos y generar los hábitos correspondientes.
El ocio no es un fin, sino un medio para descansar. El verdadero destino del hombre sobre la tierra es el trabajo.

José Manuel Pozo es arquitecto y profesor en la ETS de Arquitectura de la Universidad de Navarra

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